Ni en pleno agosto hay tranquilidad. Parece como si alguien estuviera empeñado en calentar los motores antes de tiempo y comenzar septiembre como un tifón caribeño.
Homenaje a Montse Ferrer.
No va a ser el primero ni el único homenaje que va a recibir, pero
está claro que la relación entre la ex directora comercial y de
tiendas de Majórica, Montse Ferrer, con las agencias de viajes ha
sido muy estrecha. Lustros y lustros unidos por un objetivo común:
la promoción de la Isla. Han pasado muchas cosas en Majórica, pero
la última etapa de la empresa perlera ha estado caracterizada por
una afán proespeculativo fuera de lo común y una gestión pésima,
poniendo de manifiesto, una vez más, el resultado de una operación
de reingeniería financiera chapucera con el visto bueno de uno de
los dos grandes bancos de este país... y de Argentina. Montse
Ferrer ha sabido en todo momento aguantar el tipo y estar a la
altura de las circunstancias, cuando «otros» han intentado
manipular y actuar con criterios maquiavélicos. Desde la salida de
Ferrer de Majórica, las ferias turísticas en el extranjero no son
lo mismo y falta el trato humano que ella impregnaba con su
presencia. Este jueves recibirá el galardón de oro de Aviba de
manos de su presidente, Jaume Bauzá, y el aplauso de un colectivo
que siempre ha estado a su lado. Se lo merece. Añadir que al evento
no han sido invitados políticos, dado que quieren que sea un acto
sencillo entre «iguales».
Las acciones de Sol Meliá, por debajo de la OPV de
1996.
Los analistas bursátiles han dado la señal de alerta. La menor
actividad del sector turístico hará que este año las empresas
relacionadas con la actividad turística cierren el ejercicio con
menos ingresos... y beneficios. NH Hoteles y Sol Meliá se han visto
castigadas en las últimas semanas, pero más en exceso la empresa
que preside Gabriel Escarrer. Sol Meliá cerró la pasada semana con
una cotización de 4'80 euros, un mínimo histórico que la sitúa por
debajo de los 5'41 euros a los que la empresa se estrenó en bolsa
en 1996. La decisión de Standar & Poor´s de reducir el ráting
del grupo sentó como un jarro de agua fría al valor, pese a algunos
repuntes artificiales. Habrá que esperar acontecimientos en la
próxima junta general de accionistas para ver qué estrategia adopta
Sol Meliá, que en opinión de algunos «gurús» de la bolsa española
«el valor del título aparece desconectado del valor real de los
activos del grupo».
La pataleta de Àlvarez Cascos.
El ministro de Fomento, Francisco Àlvarez Cascos, ha demostrado en
la actual legislatura una actitud antibalear que raya lo
inimaginable. Es uno de los pocos ministros que todavía no se ha
dignado a visitar las Islas. Y lo curioso del caso es que hasta el
presidente de AENA, José Eladio Seco, también se ha contagiado de
esta «balearitis» que impera en Moncloa y en determinados
ministerios, lo cual no extraña que duerman el sueño de los justos
numerosos proyectos, entre ellos el ya utópico hangar de
mantenimiento. Menos mal que por lo menos siguen aprobando
inversiones, aunque ello es más a cuestiones de rentabilidad que de
«amabilidad»... los aeropuertos de las Islas son los más rentables
para AENA. Y no digamos de la «ley del silencio» impuesta por
Àlvarez Cascos, que algunos han incumplido y han acabado en sus
casas a la espera de nuevo destino.
Inundaciones en Alemania.
Está claro que nunca llueve a gusto de todos. Lo sucedido en
Alemania es alarmante y trágico, pero las multimillonarias
inversiones que tienen que hacerse tendrán un efecto positivo en
materia laboral, que en opinión de los economistas germanos va a
provocar un descenso del paro en la mayoría de los lander
afectados. La incógnita a resolver es cómo se comportará la demanda
turística en un año tan atípico.