Conozca Mallorca en unas horas. Ésta podría ser la consigna de las compañías de cruceros que durante la temporada alta contratan grandes flotas de autocares para realizar diversas excursiones turísticas. Una opción optativa a bordo en la que participa hasta un cincuenta por ciento del pasaje en itinerarios que cubren tanto la ciudad como la part forana. Esta alternativa incluye la ventaja de la asistencia guiada junto a la posibilidad de ver en un corto espacio de tiempo los monumentos más conocidos.
Cuando los turistas desembarcan en Palma se encuentran ante una batería de autocares que puede sumar hasta doce unidades, diferenciadas según la excursión y el idioma elegido, con predominio del inglés, italiano, frances o alemán. La oferta más extendida es la de medio día, que abarca desde las ocho de la mañana a las doce del mediodía o desde las dos hasta las seis de la tarde. También existen opciones de este tipo enfocadas a los más jovenes, como itinerarios rurales en jeep o paseos en catamarán por aguas de la bahía durante unas tres horas y con bocadillo incluido por 45 euros. Asimismo, los cruceristas que embarcan y desembarcan en Palma procedentes del aeropuerto también pueden optar a excursiones organizadas antes de zarpar el buque.
Los itinerarios habituales son: la visita a Palma y casco antiguo, con la Catedral, el castell de Bellver con posibilidad de compras y desayuno en un establecimiento emblemático, que se prolonga por espacio de cuatro horas y vale unos 40 euros. La excursión a Valldemossa y Son Marroig siguiendo la ruta del Arxiduc a lo largo de cinco horas ofertada a un precio similar. No falta tampoco la visita a las cuevas del Drach.