De nuevo el telón del Teatre Municipal se abrió ayer para acoger la exhibición de danza de la escuela de Mari Carmen García, que puso sobre el escenario a una cuarentena de artistas de las más variadas edades, desde las más benjaminas, que prácticamente han aprendido a bailar al mismo tiempo que a caminar, hasta las más veteranas, que demostraron estar en excelente forma. El espectáculo estuvo basado en la banda sonora y en las escenografías de la película «Moulin Rouge», que protagonizaba "poniendo también su voz en las canciones" la australiana Nicole Kidman.
Así, sobre las tablas del Municipal pudimos ver anoche toda clase de melodías y ritmos, que las alumnas de Mari Carmen García interpretaron con gracia. Los aplausos más fervorosos del público fueron para las más jóvenes bailarinas, que se acercan al arte del movimiento con la naturalidad de quien se aproxima a un juego.
Algunas canciones célebres de las últimas décadas, como «Material girl» de Madonna, o «Roxanne», de Police, reinterpretadas para la ocasión sonaron en el teatro y fueron coreografiadas por distintos grupos de danzantes, entre los que, por fortuna, se encontraba también un chico.
Si bien las coreografías de las alumnas menores eran muy sencillas, las que interpretaron alumnas más mayores se mostraron bastante más elaboradas y ganaron en plasticidad gracias a la espectacular iluminación en rojo.
Los pasos clásicos del ballet se mezclaron sobre el escenario con movimientos dinámicos más propios de disciplinas como el aerobic e incluso al son de una melodía oriental los gestos sensuales del baile árabe se convirtieron en protagonistas.