El conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas, ha presentado una serie de ajustes al nuevo borrador de la ley se suelo rústico con el fin de conseguir el apoyo de PSM y EU-EV. La modificación se ha presentado como consecuencia de las divergencias expresadas por estos dos partidos al nuevo borrador presentado por Quetglas.
El texto que el conseller entregó el martes a las formaciones políticas incorporaba dos modificaciones importantes. La esencial era que el crecimiento del 1 por ciento no se calculará de forma lineal para todos los municipios, sino que los Consells podrán sumar el total por islas y repartirlos a su criterio.
La propuesta fue pactada entre Antich y Munar hace tres semanas y cuenta con el apoyo de la presidenta del Consell de Menorca, Joana Barceló, que no ve con buenos ojos que sean los municipios más desarrollistas quienes puedan seguir creciendo más.
Sin embargo, el reparto global por Consells no gustaba a PSM y EU-EV, que han conseguido que el Govern introduzca una serie de ajustes. La nueva ley fijará una fórmula en función de la población de derecho de los municipios. De esta forma, se establecerán diferencias entre lo que es la primera y la segunda residencia. Se podrá crecer más en aquellos municipios donde sea más necesaria la primera residencia, mientras que serán 'penalizados' aquellos otros en los que ya haya un parque importante de segundas residencias.
La propuesta, en principio, es del agrado de todos los grupos políticos, pero será muy difícil que el conseller d'Obres Públiques pueda presentar el texto para su aprobación en el Consell de Govern de hoy. A falta de ajustes finales, no se descarta que la norma se apruebe la próxima semana.