El invierno ha sido largo y las playas lo han notado. En especial por la cantidad de algas muertas que se amontonan en las orillas, además de desperdicios de todo tipo. De ahí que las autoridades de cada municipio hayan emprendido las labores de limpieza para que ahora que el verano está al caer nuestra costa luzca como siempre: limpia y hermosa.
No es un trabajo fácil, porque se trata de limpiar kilómetros de arena que, además, a ciertas horas del día se encuentra llena de bañistas. Pero como no hay mal que por bien no venga, los ciudadanos se muestran tranquilos y contentos de que las playas recuperen su aspecto de siempre. El resultado de estas tareas es ya bien visible en algunos puntos, como Ciutat Jardí, donde se han recogido bolsas y bolsas de desperdicios.