La reforma de la protección por desempleo aprobada por el Gobierno central «afectará de forma especialmente grave a los inmigrantes y a las mujeres», este último «ya de por sí el colectivo peor situado en el mercado laboral», afirmó ayer Marta Balcells, secretaria de la Mujer de CC OO.
Este sindicato hizo público un manifiesto, elaborado junto a UGT, en el que se denuncia la injusticia de una reforma laboral que «está también injustificada, porque el sistema de prestaciones por desempleo tiene más ingresos por cotizaciones que gastos en prestaciones, y que no supone una prioridad, porque ni va a generar más empleo».
CC OO defiende que esta reforma afectará en especial a las mujeres jóvenes y dificultará la aplicación de la Ley de conciliación de la vida familiar y laboral, «además de incrementar la discriminación en la protección social y el salario de las mujeres, que ya es un 30% más bajo que el de los hombres en nuestra Comunitat», recordó Balcells.
Según datos de 2001, de los 22.700 parados registrados de media a nivel nacional, el 60'6% eran mujeres, mientras que las contrataciones de féminas ese mismo año sólo supuso un 41'8% del total.
Además, en un país donde sólo un 45'5% de las mujeres en paro recibe algún tipo de prestación, frente al 75'34% de los desempleados masculinos, «nos encontramos -resaltó la portavoz- con que además de ser las mujeres las que más participan, junto a los jóvenes, de las cifras del paro, son las que menos prestaciones por desempleo reciben». Esta reforma aumentará, también según el sindicato, «la contratación precaria de las mujeres, el 95% de las cuales está ocupada en el sector de los servicios».