El programa de vacaciones de la tercera edad del Instituto de Migraciones y Servicios Sociales (Imserso), que en el período 2002-2003 se ha visto incrementado a nivel nacional en 100.000 personas, 500.000 en total, asignará a Balears 160.000 personas, unas 23.000 más respecto a la anterior edición (136.260), pero al predominar las estancias de ocho días en vez de quince días, se reduce por segundo año consecutivo el número de pernoctaciones en los establecimientos hoteleros de Mallorca, Menorca y Eivissa que colaboran en este programa.
Así, si en el programa 2001-2002 se eliminaron 54.000 pernoctaciones, desde el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales se apuntaba ayer que en la próxima edición habrá una reducción de 45.000 pernoctaciones, sumando en dos años cerca de 100.000. La causa de este nuevo descenso es que se potencian los turnos de ocho días, que en el caso de Balears supondrá casi el 50 por ciento de todo el programa asignado (75.000 plazas).
El número de hoteles de las Islas que participan en este programa es de 50 (41 en Mallorca, 2 en Menorca y 7 en Eivissa), que son los que se verán afectados por la disminución del número de pernoctaciones realizadas por el Imserso.
Las reacciones en las patronales hoteleras de Mallorca, Menorca y Eivissa por esta modificación de las pernoctaciones son contrarias a la medida adoptada por el Imserso, ya que ello va a incidir negativamente en los niveles de ocupación hotelera y gasto turístico en la oferta complementaria y comercial de las zonas que alojan el turismo de la tercera edad. Al mismo tiempo, apuntan que se perjudica de lleno a todo el proceso de desestacionalización.
Desde el Ministerio de Trabajo, en este sentido, declaraban ayer que el presupuesto destinado a este programa, que gestiona el Imserso, es de 46.688.776'37 euros. El mismo genera 30.000 empleos por temporada (5.000 directos y 25.000 indirectos), «lo cual permite que en temporada turística baja se cuente con puestos de trabajo y nuevos ingresos fiscales y en cotizaciones sociales».