El público que abarrotó las más de quinientas localidades del Conservatori de Palma disfrutó de una noche mágica con el Combat de Glosadors. La gran trobada que reunió a glosadors de Mallorca, Menorca y las Pitiüses hizo deleitar al público presente gracias a la sabiduría y al arte de la improvisación.
Esta expresión artística que se está manteniendo viva en las Islas representa la improvisación de cantar sobre cualquier tema a través de las rimas y ritmos de las palabras que se convierten en poesía. Los doce glosadors dieron buena muestra de su capacidad oral y su ingenio durante las poco más de dos horas que duró el espectáculo.
Los glosadors ibicencos fueron los primeros en subirse al escenario y rápidamente se metieron en el bolsillo a todos los presentes en el Auditori porque tuvieron un especial alarde de ironía y sarcasmo con sus gloses. Éstas se centraron especialmente en dar las gracias por haber sido invitados al acto y esperando volver a reencontrarse más a menudo con el público mallorquín.
Seguidamente, los glosadors menorquines, Benito Alfonso y Esteve Barceló, que estaban acompañados de la guitarra de Antoni Carreres, hicieron reír mucho al público y demostraron mucha veteranía en sus gloses a pesar de que éste sea su primer año de experiencia.
Finalmente, un grupo de glosadors mallorquines y menorquines finalizaron el combate haciendo mención a la presencia del conseller d'Educació i Cultura, Damià Pons. El glosador Miquel Ametller se convirtió en improvisado conseller, mientras los demás se las hacían pasar canutas, pero el menorquín se defendió con mucho orgullo. Temas actuales como la ecotasa también se mencionaron en las canciones. El colofón final a la velada lo dio la música del grupo Aires Formenterencs.