Los representantes de la Federación Balear de Caza acusaron ayer a la consellera de Medi Ambient «de querer eliminar la actividad cinegética de la Islas» tras escuchar las propuestas de veda presentadas por Margalida Rosselló durante el Consell Balear de Caza. Los aficionados criticaron, de esta forma la que denominaron «política restrictiva» de la conselleria al defender la reducción de las jornadas de caza permitidas a la semana de tres a cuatro días. Asimismo, según denuncia un representante que prefiere permanecer en el anonimato, Medi Ambient pretende prohibir la actividad en Eivissa durante los domingos y, al mismo tiempo, incrementar la tarifa que se cobra a los cotos. «La consellera habla mucho pero hace poco por el sector», señalaron.
En los mismos términos, aunque de una forma más moderada, se expresaba el presidente de la Federación Balear de Caza, Jaume Ripoll, para quien el encuentro de ayer se caracterizó «por la disparidad de opiniones». Ripoll, confirmó las intenciones «restrictivas» de la conselleria y aseguró que también pretenden prohibir los avisadores electrónicos de los perros de muestra. «Si se llevan adelante las intenciones de Rosselló seremos la primera región del mundo que prohiba este sistema».
El presidente de los cazadores recordó a la Administración que han sido precisamente las sociedades de aficionados las que se han preocupado de repoblar los cotos y de realizar un seguimiento de las capturas. «Somos los primeros interesados en mantener en buen estado la naturaleza y en mantener el número de especies. No tiene sentido reducir los días porque la presión será mayor», dijo. La última palabra sobre estas propuestas las tiene la conselleria que ya notificó a los cazadores que su decisión será publicada por decreto en el BOE.