Desde diversos puntos de la isla de Mallorca se podía ver ayer un fenómeno meteorológico extraño, aunque también de gran espectacularidad. El sol aparecía rodeado de una gran neblina, creando un círculo de «vapor» a su alrededor. Se trataba de un halo solar. El Institut Metereològic de Balears lo define como un «fenómeno óptico, en forma de anillo, con centro en el astro luminoso». Según las explicaciones de los expertos, este fenómeno «se produce por la reflexión de la luz del sol sobre los cristales de hielo de las nubes».
Todo el mundo conoce el arcoiris, que no es más que la descomposición de la luz del sol en sus colores elementales a través de las gotas de lluvia. Pues bien, el halo solar es algo parecido. Sólo que la luz se refleja a través del hielo que hay en las nubes altas, generalmente cirros. Y ayer fue un día en el que la aparición de cirros propició que todos pudiéramos observar este fenómeno, si bien el halo solar fue sólo parcial.
El curioso fenómeno se captó de forma distinta dependiendo del lugar desde donde se viera, pero todos los que pudieron observarlo gozaron de un intenso espectáculo. Aunque desde el Institut Metereològic se haya declarado que no se trata, para nada, de un fenómeno raro, lo cierto es que siempre sorprende ver algo tan curioso y poco habitual.