La barriada de Génova está en pie de guerra. La culpable es, en esta ocasión, una antena de telefonía móvil. Los vecinos de la barriada han visto como en los últimos días han proliferado los intentos por parte de una compañía de telefonía de instalar una antena de este tipo en un solar próximo a un chalet, un lugar que fue comprado originalmente por su propietario para construir una piscina. Los vecinos están dispuestos a cortar la carretera si es necesario con tal de impedir que la antena sea instalada. Uno de ellos, Guillem Moragues, explicó que «esta instalación se realizaría en una zona llena de chalets y de casas y no podemos consentirlo».
Según los vecinos, la policía ha controlado el lugar para impedir esta actuación, pero no se ha actuado con la suficiente firmeza, ya que cada vez que los agentes se van y están unos días sin pasar por la zona, vuelve a haber movimientos en la finca». Los vecinos también denunciaron la pasividad del Ajuntament de Palma y, muy especialmente, del concejal José Manuel Sierra, «que pasa de todo». La indignación de los vecinos también está relacionada con un conocido restaurante de la zona, que intenta construir un nuevo local de dos plantas y una planta subterránea. Los vecinos consideran que ya hay suficientes restaurantes en la barriada. Están dispuestos a hacer todo lo posible para evitar que la antena sea instalada en el barrio y que se construya este nuevo restaurante en Génova.