Francesc Antich, presidente del Govern balear, reunió ayer a los ganadores de los Premis Ramon Llull en todas sus modalidades desde su instauración en 1997. Una amplia representación de los premiados con esta distinción, unos veinte galardonados, acudieron a la cita y participaron en este encuentro, estrenado «con el objetivo de mantener vivos estos premios y tender la mano desde las instituciones a la sociedad civil para que se sienta implicada y aporte sus opiniones y experiencias», afirmó Antich.
El presidente de la Comunitat Autònoma compartió mesa con las actrices Maruja Alfaro y Catalina Valls; con la lingüista Aina Moll y el sacerdote Bartomeu Suau, todos ellos premiados en diferentes convocatorias. De hecho, los galardonados compartieron mesa con premiados en los cinco años de existencia de este premio. También asistieron al acto Bartomeu Llinás, el profesor Melcior Rosselló, el sacerdote Bartomeu Catalá, el escultor Jaume Mir, el estudioso de Ramon Llull Antoni Bonner y el ingeniero Andreu Ripoll.
El ciclista Joan Llaneras, el catedrático Antoni Roig, la pintora Jannick Vu, el músico Victori Planells y el ex presidente de GESA y ENDESA Felicià Fuster tuvieron la oportunidad de compartir mesa, al igual que el teólogo Bartomeu Bennasar, la pintora Angela Von y el también teólogo Llorenç Tous; y la cocinera y profesora Margalida Alemany, el investigador José Casasayas, el ex presidente de la OCB Climent Garau y José Cascales. «Son unos premios humildes que no quieren que se queden sólo en el día de la entrega», afirma Jannick Vu.
· M. Azagra.
Fotos: Sebastià Amengual.