Ricardo Aracil cumplirá el próximo mes de agosto un nuevo objetivo. El deportista mallorquín lleva catorce años pilotando globos aerostáticos y hace unas semanas se ganó el pasaporte para participar en el Campeonato del Mundo. El piloto isleño se desplazará a Chatellerault (Francia) con la mente puesta en la victoria, aunque sabe que superar a japoneses, alemanes y americanos es lo más parecido a una misión imposible. Hace catorce años Ricardo Aracil introdujo los globos aerostáticos en Mallorca. La idea del piloto era ofrecer una alternativa para visitar la Isla a los turistas. Creó la empresa Mallorca Balloons junto a su hermano Jordi y empezó a ganar en horas de vuelo. La precisión de los deportistas mallorquines se depuraba y comenzaron a competir.
Pilotar un globo aerostático es conocer el arte de flotar. La dirección del globo la decide el viento y los deportistas deben subir o descender para apoyarse en la corriente que más les conviene. La dificultad del pilotaje es máxima y se necesitan los equipos más modernos para poder participar en competiciones. Ricardo y Jordi Aracil llevan unos años animando el Campeonato de España. Junto a otros jóvenes pilotos han terminado con la superioridad del trio de siempre y se están haciendo un hueco en la elite del deporte Nacional. Ricardo Aracil es en la actualidad el tercer mejor piloto de España mientras que Jordi es el quinto. El tercer puesto en el ránking nacional permitirá que Ricardo participe en el Campeonato del Mundo que se celebrará del 21 al 31 de agosto en Chatellerault (Francia). Jordi está esperando la baja de uno de los cuatro pilotos que se encuentran clasificados por delante de él, ya que son cuatro los deportistas españoles que pueden participar en el Mundial.
España está ganando posiciones en el ránking mundial de globos aerostáticos. En el último mundial el catalán José María Lladó logró el segundo puesto, pero es un resultado que costará repetir. Ricardo Aracil asegura que se desplaza a Francia con el objetivo de ganar, pero derrotar a los pilotos japoneses, alemanes y americanos es extremadamente complicado. Estas tres naciones acostumbran a copar los diez primeros puestos del Campeonato del Mundo y sus equipos son espectaculares. Los pilotos tienen a su disposición metereólogos, radares, satélites y todo tipo de material de última generación.
Ricardo Aracil no va a competir en las mismas condiciones. Su participación en el Campeonato del Mundo va a suponer un desembolso aproximadamente 6.000 euros y tiene que recortar gastos. Se llevará al Mundial al madrileño Rafael Carrasco y su equipo para evitar tener que pagar gastos de desplazamientos. Lo único con lo que Ricardo viajará desde Mallorca será la vela con la que asaltará el Mundial, vela que publicita Ibatur. La modestia del equipo con la que Ricardo Aracil afronta su concurso en el Campeonato del Mundo en Francia nada tiene que ver con los deportistas de elite. Los equipos acostumbran a desembolsar unos 150.000 euros para programar las competiciones durante seis años.