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Los alumnos del colegio de Sant Jordi sorprenden al barrendero

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Tomeu, barrendero de Sant Jordi, no olvidará jamás el día de Sant Jordi de ayer. Ni tampoco el gran concepto que le tienen los alumnos del colegio público, ejemplo de alumnos y de colegio -y lo decimos con conocimiento de causa, pues hemos estado con ellos en otras ocasiones, para otros trabajos-, quien a diario trata de mantener limpia sus calles y plazas, de lo cual -de la limpieza- los críos entienden mucho, ya que desde hace tiempo andan metidos, tanto en la teoría como en la práctica, en temas medioambientales, basta, si no, ver cómo está el lugar y cómo son las campañas que hacen, incluso entre sus familiares, a quienes recomiendan no echar ni un papel en la calle, lo cual ¡oído, sobre todo políticos y oportunistas-, no es exportable, ni vendible, a no ser que sea con la denominación de origen: colegio público de Sant Jordi.

Bien, a lo que íbamos. Resulta que de los tres cuentos que con motivo del Dia del Llibre escribieron otros tantos grupos de alumnos del centro, uno de ellos, «Ajudem en Tomeu», cuyos autores son Paula, Maria y Ana, de sexto curso, cuya tutora es Francisca Pastor, versa sobre Tomeu, el barrendero del barrio, al que comparan con el Quijote, quien no sólo limpia y da esplendor a sus calles y plazas, sino que, según vemos a lo largo del relato, termina por echar a todos aquellos jóvenes que por las noches se dedican a incordiar al vecindario.

Ni que decir tiene que el bueno de Tomeu, que llegó hasta la entrada del centro completamente engañado, flipó en colores a medida que se iba percatando que todo aquello iba por él. Que aquel héroe era él, que los niños le veían así. Como pudo, con la voz entrecortada, entre sorprendido -¿cómo cuento yo esto en casa?- y ruborizado, pero feliz, dio las gracias, primero a los críos y luego a los demás, entre los que se encontraban el conseller de Cultura, su director general, la inspectora de enseñanza Galindo, y altos cargos de EMAYA, así como el bueno de Xisco, el policía de barrio, excelente profesional donde los haya, compinchado como el resto en todo este asunto.

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