Las disputas internas en el Consell Insular de Mallorca dejaron desde ayer sin efecto la norma cautelar que frena la construcción en suelo rústico. PSM y Esquerra Unida no quisieron apoyar la norma del Consell que permitía edificar un máximo de 450 viviendas anuales en suelo rústico, una decisión que se producía el último día de vigencia de la norma cautelar aprobada en enero. A partir de ahora, según UM, cualquier petición de licencia para edificar en el campo mallorquín deberá ser tramitada sin ningún obstáculo. Para el PSM y Esquerra Unida el suelo rústico aún tiene garantizada su protección, en contra de las tesis de UM y de los técnicos del Consell.
La norma de las 450 viviendas por año ni siquiera fue sometida a votación. PSM y EU pidieron que el pleno no se celebrara, aunque el debate político comenzó gracias al apoyo del PP, que votó la urgencia de la sesión plenaria. «Sería prudente no celebrar el pleno», rogó Antoni Alorda, del PSM. Pero el debate comenzó sin saber si la norma sería aprobada. El conseller d'Ordenació del Territori, Rafael de Lacy, advirtió que ayer era el último día para tomar una decisión respecto a los criterios de construcción en suelo rústico. A partir de ahora, según Lacy, la moratoria ya no está en vigor. Además, Lacy recalcó que la institución no podría aprobar otra norma cautelar esta legislatura. Tras conocer la postura de PSM y EU, Jaume Font, del PP, pidió responsabilidad a los partidos del Pacte que gobiernan en el Consell. «Deben hacer un ejercicio de responsabilidad», exigió el dirigente del PP.
Marilena Tugores, de EU"Els Verds, cuestionó la norma de las 450 viviendas al año y lamentó que el acuerdo posibilitase también la concesión de otras 600 licencias presentadas entre julio de 2001 y el 25 de enero de este año. «La propuesta va más allá de lo que nuestro grupo puede aceptar», argumentó. Antoni Alorda se mostró en contra del sistema de cupos, y cuestionó que la propuesta del Consell no tuviese efecto retroactivo. «Si la institución está interesada en frenar la construcción en el campo, UM puede proponer mañana mismo una suspensión de licencias en suelo rústico», subrayó Alorda. La socialista Francina Armengol volvió a garantizar los votos de su grupo a la norma de las 450 viviendas. «Nuestro partido hubiese preferido el consenso, pero somos responsables y hemos de evitar que se construya en suelo rústico», expuso.
Joan Verger, del PP, cuestionó el contenido de la norma presentada por el gobierno del Consell, mientras el portavoz, Jaume Font, aseguró que cuando gobernaba su partido se construían menos viviendas al año en suelo rústico. «Lo que le recomendaría a Alorda es que dejase el gobierno; me sabe mal, pero el gobierno del Consell está tocado», opinó Font. Alorda respondió que su grupo no estaba dispuesto a dar a UM un «cheque en blanco» para adoptar medidas urbanísticas, mientras Tugores admitía: «este tipo de espectáculo no gusta a nadie». Armengol recalcaba que su grupo apoyaría el acuerdo sugerido por UM.
Sin embargo, y cuando la norma debía votarse, Rafael de Lacy pidió la palabra. «Ha sido un fracaso personal. Creía que los criterios tenían el apoyo de todos grupos, pero no ha sido así. En cualquier caso, UM siempre ha creído que puede construirse a partir de 14.000 metros», planteó Lacy, quien pidió que la norma no se votase. Munar descartó adoptar represalias contra sus socios del PSM.
Font descubrió un olvido en la propuesta de las 450
viviendas
El portavoz del PP en el Consell, Jaume Font, descubrió durante el
plenario que el acuerdo de la norma de las 450 viviendas aprobado
en comisión no era el mismo que el que sometía a votación en el
plenario. Tugores admitía el mismo error, que fue confirmado por el
secretario de la institución. Durante el pleno, Font pidió
explicaciones a Lacy sobre el olvido del gobierno del Consell al no
incluir dos propuestas aprobadas en comisión, pero el error no
llegó a aclararse. Durante el debate, Font se mostró partidario de
permitir un máximo de 350 viviendas al año en suelo rústico en
Mallorca. Además, el portavoz del PP dudó que el plan territorial
llegue a aprobarse.