El Govern ha decidido seguir el modelo del Consell para la elaboración del proyecto de ley de regulación del crecimiento, más conocido como ley de cupos, y estudia la posibilidad de fijar un sistema equivalente al que pondrá en marcha la institución insular, similar al concurso. En cualquier caso, lo que ya se da por hecho es que la ley no aplicará un crecimiento similar en todas las Islas ni, dentro de las Islas, en todas sus zonas. De esta forma, las fuentes consultadas han señalado que la ley será mucho más restrictiva en los municipios de la costa, incluido en ellos Palma, que en los del interior.
La decisión supone un cambio notable con respecto a los borradores elaborados hasta la fecha por el departamento d'Ordenació del Territori del Govern. La Conselleria d'Obres Públiques ya había entregado a sus socios de Pacte dos borradores de la ley en los que se fijaba el cupo en función de los porcentajes sobre capacidad urbanística ya construida. El cambio de modelo se acordó en una comida mantenida por el president del Govern, Francesc Antich, y la presidenta del Consell, Maria Antònia Munar, el pasado miércoles. A la comida asistieron además diversos representantes de Govern y Consell encargados de la regulación urbanística.
Según ha podido saber este periódico, en el transcurso de esa comida los representantes del Consell de Mallorca explicaron a Francesc Antich la propuesta de cupos en suelo rústico que el pasado viernes aprobó la ponencia técnica de la Comissió Insular d'Urbanisme. Los responsables del Govern consideraron que la propuesta era correcta y aceptaron modificar el rumbo de trabajo de los borradores realizados hasta la fecha, aunque ya existían conversaciones previas al respecto entre los titulares de Ordenació del Territori de una y otra administración, Francesc Quetglas y Rafael de Lacy.