El Colegio de Arquitectos Técnicos de Balears estima que la moratoria urbanística reducirá en un 50 por ciento el número de visados de obra en Mallorca durante el año 2002, porcentaje que ascenderá al 70 por ciento en 2003 y que mantendrá al sector de la construcción «paralizado» en 2004 y 2005, según afirma el presidente de la entidad, Jaume Gibert. El presidente de los aparejadores argumenta que la política urbanística de Govern y Consell ha reducido en un 85 por ciento la posibilidad de construir en Mallorca y que la «demora» en la redacción de los planes territoriales, -normativa que ha de marcar y definir el crecimiento urbanístico de las Islas en los próximos años- no hará más que alargar la ralentización de un sector que se caracteriza por una actividad de ciclo largo.
Los visados de obra registrados han descendido un 28 por ciento durante el primer trimestre de 2002, «porcentaje que llegaría al 50 por ciento si sólo cuantificáramos las obras con licencia otorgada durante el actual año 2002», señaló Gibert. «Sucede que los aparejadores estamos visando obras con permisos fechados en julio del año pasado puesto que el proyecto básico, con el que se pide el permiso de obra, se registra primero en el Colegio de Arquitectos y sólo se visa en el de Arquitectos Técnicos cuando se inicia la ejecución de obra».
Durante el año 2001 el número de visados de viviendas de nueva planta, entre unifamiliares, adosadas y plurifamiliares, se redujo un 21 por ciento respecto al año anterior. Pese a este descenso, el presidente de los aparejadores afirma que el anuncio de la inminente entrada en vigor de la moratoria urbanística aceleró la decisión de un gran número de proyectos en 2001, para conseguir licencia de obras. Durante el ejercicio pasado se registró un aumento del 5 por ciento en los visados para obras de reforma o ampliación. También aumenta un 5 por ciento el número de certificados de final de obra, consecuencia de la edificación de construcciones anteriormente visadas, que conlleva un periodo de entre uno y cuatro años.
En 2001, finalmente el conjunto de obras construidas y sus consiguientes parcelas, consumieron un total de más de 14 millones de metros cuadrados de superficie, lo que supone un 0'38 por ciento del total de la extensión de Mallorca. Durante el año 2001 se terminaron un total de 8.875 viviendas en Mallorca de las que Palma absorvió un 30 por ciento y un 15 por ciento en cuanto a nuevos edificios plurifamiliares construidos. Del estudio de las obras finalizadas durante los tres últimos años, el Colegio de Aparejadores concluye que Palma ha absorvido sólo el 14 por ciento del crecimiento del total de edificaciones, lo que supone más de un 27 por ciento en número de viviendas.
En cuanto a consumo de solares durante los tres últimos ejercicios, Ciutat representa el 14'33 por ciento del total de los consumidos en las Islas. A juicio de los arquitectos técnicos este porcentaje de crecimiento no es excesivo y destacan los crecimientos de la edificación en los municipios de Capdepera, Son Servera, Marratxí, Alcúdia y Calvià, proporcionalmente con menos habitantes que Ciutat. Pese a ello, el número de autorizaciones de Cort ha descendido.