J. RODRÍGUEZ
La moratoria parcial de puertos deportivos que aprobó el Consell de
Govern la semana pasada, que será definitiva dentro de seis meses,
supondrá la paralización de seis proyectos que incluían la creación
de entre 1.800 y 2.800 amarres, según comentó el director general
del Litoral, Onofre Rullán. Rullan, que explicó la moratoria junto
a la titular de la conselleria de Medi Ambient, Margalida Rosselló,
destacó que los expedientes paralizados corresponden a la creación
de dos nuevos puertos en la Bahía de Sant Antoni, en Eivissa, otro
en Cala Galdana, Menorca, y otro en Sant Elm además de la
ampliación de los puertos de Palmanova y es Barcarés, en
Alcúdia.
La consellera destacó que la moratoria impide la creación de nuevos puertos y sólo permite la ampliación, en un 10 por ciento de su capacidad, cuando esté justificada para mejorar el servicio. En este sentido Rosselló destacó que la moratoria, que tendrá tres años de vigencia, es el paso previo a la redacción definitiva del Plan Sectorial de Puertos Deportivos. Con la puesta en marcha de este plan, el Govern «ordenará y regulará el litoral, no sólo de dar salida a la demanda, que siempre es constante», señaló.
La consellera recordó que en las Islas hay un censo de 30.000 embarcaciones, a las que hay que sumar unas 8.000 que llegan en verano, «y en Balears hay 20.000 amarres por lo que también se debe regular el tema de los fondeos». Por otra parte, Rosselló pidió que «se agilicen al máximo» los trámites para las obras del trasvase de sa Costera, que tienen un presupuesto aproximado de unos 56'5 millones de euros, a fin de que puedan iniciarse a finales de este año. Rosselló destacó la importancia de estas actuaciones sobre todo si se tiene en cuenta que cada día se pierden unos 200.000 metros cúbicos de agua.