El conseller d'Agricultura i Pesca, Mateu Morro, negó ayer la versión de las organizaciones agrarias sobre el retraso en el pago de ayudas y aseguró que su departamento tramitó, durante el ejercicio 2001, un total de 38 millones de euros (6.396 millones de pesetas) en ayudas propias y de Fondos Europeos. De esta forma el conseller, que presidió el Consell Agrari, salía al paso de las amenazas sobre manifestaciones vertidas en los últimos días por Asaja-Balears y Unió de Pagesos debido, aseguran, a que muchas ayudas prometidas no están siendo cobradas.
Morro, utilizando datos de la Conselleria, destacó que a día de ayer sólo restaban por tramitar cinco de las 70 líneas de subvenciones abiertas, ayudas que apenas llegan a suponer 1'45 millones de euros (242 millones de pesetas) por lo que, a su parecer, «el nivel de pago es elevado». El conseller del sector, en este sentido, señaló que del total adeudado 0'78 millones de euros (128 millones de pesetas) corresponden a la reposición de árboles muertos durante la sequía del año pasado.
Esta versión del conseller fue contestada por las organizaciones agrarias a través de sus dirigentes. Así, Gabriel Company de Asaja-Balears criticó «el mundo idílico» que, a su juicio, pretende ofrecer Morro al sector, señaló que las ayudas satisfechas son las habituales «sin tener en cuenta los problemas extraordinarios que hemos pasado» y reiteró sus críticas hacia el Govern «por ser el Ejecutivo autonómico que menos dinero ha destinado a la agricultura». Tampoco convencieron las explicaciones del conseller a Joan Mas, de Unió de Pagesos, quien se quejó del exceso de burocracia y criticó la falta de colaboración entre conselleries.
Mas se refería, de esta forma, a la falta de un horno incinerador de restos animales y a la negativa de permitir más pozos agrícolas y, aunque reconocía que no son competencia de Agricultura sino de Medi Ambient, recordó que «ambos están en el mismo Govern». El Consell Agrari también trató de la futura central láctea de Porreres, que será gestionada por Productes illencs lactis, Prilac, y que entrará en funcionamiento antes de verano. Asimismo se habló de la futura denominación de origen «Oli de Mallorca» y de las indicaciones geográficas «Herbes de Mallorca», «Vi de Formentera» y «Vi de Menorca».