Hoy comienza en Madrid el Foro Mundial de ONG sobre Envejecimiento que, hasta el día 9, reunirá a más de 2.000 representantes de la sociedad civil de todo el mundo, asociaciones de personas mayores y organizaciones no gubernamentales de acción social y de ayuda al desarrollo que debatirán sobre salud, pensiones, medio ambiente y voluntariado. El envejecimiento se ha convertido, a decir de todas las previsiones futuras, en la característica dominante de las sociedades del siglo XXI, y nuestra Comunitat no es una excepción.
Por este motivo, Balears estará representada en este foro por diez delegados, cinco de los cuales representarán a las federaciones y los otros cinco irán en nombre del territorio (3 de Mallorca, 1 de Menorca y 1 de Eivissa-Formentera), según se acordó en la reunión mantenida el miércoles entre la consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, y las asociaciones y federaciones de personas mayores de las Islas.
Por la Federación de Asociaciones de Personas Mayores de Balears asistirán Miquel Trías Roca y José Torralba Valls; por la Federación de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas de la CAIB irá Francisco Ferrer Pérez, y por la Federación de Asociaciones de Personas Mayores de Menorca acudirá Gabriel Martínez Camps. Además, en representación de Mallorca asistirán Juan Matas Antich, Antonio Oliver y Margarita Bauzá, y por Menorca, José Pons Allés. En esa misma negociación se perfilaron las propuestas que los representantes plantearán en el foro, la primera de las cuales se referirá a la petición de incremento de las pensiones no contributivas.
Asimismo, los delegados insulares reclamarán la necesidad de creación de más centros de estancias diurnas, de potenciar y mejorar el servicio de ayuda a domicilio y solicitarán a las administraciones públicas viviendas de protección oficial para personas mayores. Enmarcadas en la comisión de envejecimiento y tiempo libre, los delegados instarán a los gobernantes a aportar más ayudas destinadas al ocio de los mayores y a potenciar la solidaridad entre personas mayores válidas y asistidas a la hora de realizar actividades lucrativas.
Otro de los propósitos con que la delegación balear viajará a la capital será el de combatir la «imagen negativa» que se tiene de este colectivo con medidas concretas como incentivar la presencia de los mayores en las instituciones y en las listas electorales o crear direcciones generales específicas en las administraciones públicas. Por último, los delegados someterán a debate propuestas referidas a que desde las instituciones se subvencione la acogida de mayores por parte de familiares y que se difunda la idea de que los mayores son tan útiles para los jóvenes, como éstos para los ancianos.