M.JUNCOSA/ N.DOMBLÀS
El sector turístico de Balears considera la aplicación del impuesto
turístico a partir del 1 de mayo, «una noticia negativa que tendrá
graves prejuicios para la economía de Balears». Los hoteleros
reiteran su intención de recurrir masivamente las liquidaciones de
la ecotasa, pero también temen que la noticia influya en las
decisiones de los mayoristas europeos de cara al verano, algunos de
ellos podrían plantearse la reducción de capacidades y plazas de
avión hacia Balears dados los bajos niveles de reservas
contratadas. Asimismo, la oferta complementaria teme que el anuncio
en los mercados europeos de la aplicación en mayo del nuevo
tributo, genere cancelaciones de paquetes turísticos ya contratados
y una retracción en las ventas de nuevas reservas, que se sumarían
a «un invierno nefasto para las empresas del sector».
«El acuerdo entre Govern y touroperadores para aplazar el impuesto turístico hasta noviembre parecía cantado, por lo que la noticia de su aplicación en mayo no hace más que provocarnos una grave preocupación», afirma el presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Pere Cañellas. Sobre próximas contrataciónes con los touroperadores, Cañellas dice que se llevarán a cabo según la relación de cada empresario hotelero con el respectivo mayorista, «espero que para el año que viene la ecotasa se incluya en el precio del paquete turístico, pero otra cosa es que cada empresario juegue con ella a la hora de negociar descuentos o ofertas con el touroperador. En todo caso, es pronto para decirlo».
La recién creada patronal de las grandes empresas de la oferta complementaria, AMAT, se muestra «bastante pesimista» de cara al verano. Según palabras de su presidente, Damià Seguí, «la ecotasa puede generar cancelaciones en las reservas y un lastre para nuevas contrataciones. Para nuestras empresas, una reducción en el número de turistas, especialmente después de haber registrado descensos en la facturación del 30 por ciento en invierno, no hace más que acrecentar nuestra preocupación», concluyó.
En el mismo sentido, la patronal de restauración de Mallorca, manifiesta su preocupación ante el actual descenso en la facturación de sus empresas afiliadas que llega hasta el 20 por ciento respecto al año pasado, según su presidente, Antonio Gil. Bares, restaurantes y empresas situadas en las zonas turísticas temen que se mantenga la misma tónica en cuanto a la reducción del turismo respecto al año 2001.
El presidente del Fomento de Turismo de Mallorca, Miquel Vicens, advierte que los mayoristas europeos deberán avisar a todos sus clientes sobre la obligación de pagar la ecotasa a partir de mayo, por lo que, a su juicio, genera el peligro de que algunos de ellos opten por canviar de destino. Para Vicens, las cancelaciones serán poco importantes, «pero el cobro del impuesto generará problemas que perjudicarán gravemente la imagen de Balears.