El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, está dispuesto a perdonar por todos los ataques que ha recibido del Pacte por su supuesta intervención en el «caso Formentera», que ayer fue archivado por el juez Antoni Monserrat. Matas declaró ayer a este periódico que a partir de ahora Antich ya no tiene más excusas para justificar su gestión como president del Govern.
"¿Cómo valora el contenido del auto del juez Antoni
Monserrat?
"Ha quedado demostrado que el tiempo nos
ha dado la razón y ha puesto a cada uno en su sitio. La verdad
demuestra que el Govern se ha dedicado a lanzar calumnias e
insultos como única respuesta a su mala gestión, como una cortina
de humo, con el único fin de esconder su falta de iniciativa
política. Ha sido una estrategia equivocada. Ahora hay que
preguntarle a Antich a qué se ha dedicado durante los últimos años.
No tiene más excusas y el tiempo se acaba.
"¿Usted también cree, como dice el juez, que se ha
producido un juicio paralelo con el «caso
Formentera»?
"No quiero hacer ninguna valoración
sobre este asunto. Mi responsabilidad política me exige perdonar,
aunque mi corazón me pida lo contrario. Me gustaría que este asunto
sirva para desterrar esta forma de hacer política porque los
políticos debemos dedicarnos a trabajar y no a hacer política
barriobajera y deleznable, de acoso y derribo al contrario. Hay que
trabajar para los ciudadanos y espero que con este proceso algunos
hayan aprendido la lección.
"¿Lo ha pasado mal por todos los ataques que ha recibido
durante la instrucción del «caso Formentera»?
"Ya le
he dicho que quiero olvidarlo todo, pero no voy a negar que ha sido
bastante desagradable. En cualquier caso, siempre he tenido la
conciencia muy tranquila porque nunca tuve nada que esconder.
"¿Volvería a impulsar la misma política de apoyo a la
emigración si hubiese sabido lo que pasaría con el «caso
Formentera»?
"No tengo ninguna duda de ello. En el
año 92 el Govern del PP inició una política de apoyo a los
emigrantes que fue encomiable, sobre todo para las personas que
vivían fuera de Balears, pero por desgracia este gobierno de
izquierdas también se ha encargado de destruir todo lo que habíamos
conseguido. Es evidente que el gobierno de izquierdas se ha
dedicado a desprestigiarme desde que el PP ganó por una aplastante
mayoría absoluta en las últimas elecciones generales.
"¿Está convencido de que le atacaban a usted por la
victoria del PP de hace dos años?
"Es algo evidente.
El «caso Bitel» y el «caso Formentera» surgieron después de que el
PP consiguiese la mayor victoria de su historia en Balears mientras
el PSOE perdía la mitad de sus votos. Como consecuencia de esta
derrota empezaron a surgir los asuntos diseñados por los fontaneros
de Antich, que lo tienen preso. Con estos supuestos escándalos el
presidente del Govern ha intentado ocultar su falta de capacidad
para gobernar, para resolver los problemas de estas Islas, pero el
tiempo se ha acabado. Antich deberá ahora responder qué ha hecho
porque ya no le servirá de excusa atacar a Matas a cada
momento.