La Asociación de Padres de Alumnos del Col·legi Públic d'Establiments denunció ayer los pésimos accesos al centro y las condiciones inadecuadas del patio en el que hacen el recreo los niños de 3 a 5 años. El APA ha decidido recurrir a la denuncia pública ante la situación de «impotencia» en que se encuentran desde hace cuatro años por la actitud de la dirección del centro, «que se niega a escucharnos». En concreto, los padres se quejaron de que la entrada y salida del centro se realiza a través del polideportivo adosado a la escuela, «mediante una estrecha puerta por la que sólo se puede entrar de uno en uno y por donde apenas caben las sillas de ruedas o los cochecitos de bebés».
«Todo porque la entrada tradicional del colegio, mucho más amplia, está inutilizada por el aparcamiento de coches de profesores», afirmaron. Además, criticaron la reducción a un tercio del patio de juegos de Educación Infantil, «donde se amontonan cerca de 80 niños de 3 a 5 años, mientras no se da ninguna utilidad a otro espacio mucho más amplio». En su opinión, «la excusa de la seguridad de los niños encubre una menor necesidad de cuidadores». A partir de los seis años, continuaron los padres, «se utiliza como patio de recreo el polideportivo anexo, donde hay una pequeña ventana en el enrejado que cierra la escuela por donde puede salir cualquier niño».
En definitiva, los padres reconocieron que «aunque los espacios cumplen los mínimos legales, no responden a la lógica, sino a una mayor comodidad de los docentes». Condenaron la falta de cuidadores y la nula atención que reciben sus demandas. Desde la Conselleria d'Educació del Govern se informó que «en respuesta a las quejas recibidos de parte de los padres del centro se realizó una inspección, que evidenció la necesidad de construir dos aulas nuevas y de mejorar el acceso de entrada al colegio». «Estas dos obras se realizarán en verano, pero el resto de peticiones compete a la organización interna del centro y debe tratarse con la dirección».