La presidenta de la Casa Balear en Santa Fe (Argentina), Paulina Riera de Kunte, declaró ante el juez que instruye el «caso Formentera» que «la gente votó (en 1999) al único partido que se acercó a los emigrantes, y al único presidente, Jaume Matas, que les había visitado desde la fundación de la casa en 1923». La testigo argentina negó que hubiese fomentado el voto para el PP, tal y como sospecha la acusación particular en la supuesta trama organizada por ese partido político en 1999. «Nosotros no fomentamos el voto para el PP», dijo Riera a los medios de comunicación tras finalizar su declaración en el Tribunal Superior de Justicia de Balears, que se prolongó durante seis horas.
«Tenemos 700 socios y hay gente de distintas líneas políticas, por ello, tenemos que responder a todas las inquietudes y no crear malestar». La presidenta de la Casa Balear en Santa Fe insistió en que «la gente tiene que entender que allá no podemos especular con que si hay un diputado, o no, porque acabo de enterarme de la importancia que tiene para vosotros este tema». Explicó que las partes personadas en la causa le preguntaron por el papel que había desempeñado la Casa Balear en Santa Fe en la supuesta captación irregular de votos entre los emigrantes.
«Les expliqué cómo funcionamos, porque desde aquí es bastante difícil de entender ya que son muchas personas las que trabajan en el centro voluntariamente para atender a todos los emigrantes que quieren conservar la nacionalidad española, y con mucha más razón ahora, con la crisis actual que padece Argentina», afirmó.
Añadió que desde el año 92 «trabajamos en el Proyecto 2000 en el que damos información para que no quede ningún descendiente balear sin poder recuperar su nacionalidad perdida española». «La Casa Balear nunca llegó a constituirse como oficina comercial, aunque a mí me hubiese gustado personalmente, ya que una vez vine a Palma para que el centro fuese el nexo entre los dos países», dijo Riera. Precisó que el ministro de Medio Ambiente y ex president del Govern balear, Jaume Matas, «fue el único mandatario que nos visitó en toda la historia del centro que se remonta a 1923, ya que siempre habíamos sido los grandes olvidados por parte de las autoridades de Balears».