Margalida Rosselló, consellera de Medi Ambient, y los consejeros de Andalucía y Castilla-La Mancha mostraron ayer su rechazo al documento sobre desarrollo sostenible, al considerar que no se ha consensuado con las comunidades, no fija objetivos temporales, ni tiene compromisos presupuestarios. El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, presentó este documento en la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado y destacó que esboza una política de desarrollo sostenible para los próximos 25 años. Rosselló, recordó que su Govern ya pidió la retirada del documento para poder debatir la cuestión en profundidad para valorar la situación ambiental actual y cómo se quiere avanzar, aunque ello suponga ir sin documento «a las importantes citas internacionales». Dijo que «llega tarde» y está «a años luz de estar consensuado» con comunidades, municipios y otras instituciones y se preguntó por el «grado de permeabilidad» que tendrán las alegaciones.
A su juicio, el documento es «superficial y benevolente» con la situación actual, cuando «los problemas ambientales son muy tozudos y requieren de políticas activas, claras y concretas», que incumben también a otros Ministerios. Tras insistir en que el documento no realiza «la diagnosis ambietal», ni hace autocrítica, Roselló precisó que falta concreción en muchos de sus apartados, así como la temporalización de los objetivos, un estudio económico y compromisos presupuestarios, porque «la voluntad política se tiene que expresar en partidas presupuestarias». Por su parte, el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, animó a las Comunidades Autónomas a participar de forma más activa, con aportaciones, en la definición de la Estrategia Española de Desarrollo Sostenible.
El ministro Matas admitió que el documento es «sustancialmente mejorable» y «susceptible de recoger todas las aportaciones que lo enriquezcan», ya que se trata de aprobar una Estrategia, actualmente en fase de consultas, con «el mayor grado de consenso posible», por lo que es «muy importante la opinión de todo el mundo». En este sentido, el ministro lamentó que tras presentar el pasado diciembre este documento se han recibido aportaciones del Consejo Económico y Social (CES) y de grupos ecologistas, pero «desgraciadamente algunas comunidades no han hecho llegar sus sugerencias». Por ello, desveló que el pasado mes el Ministerio remitió una carta a las comunidades con el objetivo de que hicieran llegar sus propuestas a la Estrategia.