Representantes de diversas instituciones europeas que trabajan en defensa de los derechos de las minorías lingüísticas participan entre ayer y mañana en el «II Foro de la Asociación para la Diversidad 2002» que acoge la Fundación La Caixa. Este encuentro ha sido organizado conjuntamente por la Conselleria d'Educació del Govern balear y la Oficina Europea de las Lenguas Menos Extendidas.
El director general de Política Lingüística, Joan Melià, explicó ayer que «desde el Govern teníamos gran interés en la organización de este foro porque entendemos que la promoción y reconocimiento de todas las lenguas de Europa en el marco de las instituciones comunitarias es importante de cara a preservar la riqueza y diversidad lingüísticas». Pero, además, consideró, «la protección de las lenguas europeas es también un beneficio para la lengua catalana, y su proyección futura depende en buena medida de lo que pase con las demás lenguas en el marco europeo».
Con la celebración del foro en Balears, añadió, «hacemos presente entre los ciudadanos que viven aquí que la cuestión de la diversidad lingüística no es sólo propia de esta tierra, si bien nuestro caso es extremo en determinados aspectos, pues viene marcado por una época de prohibición, por la inmigración y por el turismo, que implica de por sí una diversidad lingüística».
Por su parte, el presidente de la Oficina Europea, Bojan Brezigar, apuntó que el foro es «una gran ocasión para que las regiones con lenguas minoritarias, entre las que normalmente no hay mucha conexión, se puedan ver, discutir y, si cabe, promover proyectos juntos». Entre los objetivos del foro se encuentran «aportar ideas para el proyecto Interreg III de la UE, así como la promoción de la regionalización entre los futuros estados miembros de la Unión Europea que no tienen tradición en este sentido, como Hungría, Eslovaquia o la República Checa».