Todas son igual de largas, unas finas y otras más gruesas, generalmente son de suave tacto, pero las de gran prestigio son las de diseño italiano. Nos referimos a las corbatas, que exhiben una amplia variedad de colores y detalles, conservando siempre el mismo corte. Están siempre a la moda y sin ellas la elegancia no es completa. Las corbatas nacionales se nutren del tejido italiano, donde está el diseño.
En la actualidad se llevan las corbatas de tonos suaves, lilas, celestes, amarillos, blancos y negros, con pequeños detalles. Todo lo contrario a las de hace unos años, que lucían grandes dibujos y colores fuertes. Los extranjeros, sobre todo alemanes, prefieren comprar marcas como «Versace». Los españoles, por contra, no buscan primeras marcas sino una corbata que realmente les guste o vaya a juego con camisa y traje.
El cuanto al precio, las hay para todos los gustos, pero suele oscilar entre las 8.950 de la firma Pascali, 9.980 pesetas de Vittorio & Luccino, hasta las 12.960 de Versace o Armani. Por supuesto que las hay más caras y también más económicas. Otro de los detalles a tener en cuenta es el nudo. Existen dos tipos de nudos, el Windsor (doble nudo) y el four-in-hand (un nudo). Este último es el que se lleva. Aunque en realidad todo depende de la camisa, pues si es de cuello abierto el nudo tiene que ser más grueso. Si el cuello de la camisa es largo y cerrado el nudo ha de ser el four-in-hand. El reportaje se realizó en la boutique «Sinatra» y El Corte Inglés.