La consellera de Benestar Social del Govern, Fernanda Caro, presentó ayer la campaña «Antes inmigrantes. Ahora ciudadanos», puesta en marcha para fomentar el empadronamiento de los inmigrantes que residen en Balears, sea cual sea su situación legal. Caro explicó que «su inclusión en los padrones municipales es el primer paso para que los inmigrantes puedan empezar a sentirse y ser considerados como ciudadanos de pleno derecho». El empadronamiento no implica su regularización, «pero sí les permite acceder a toda una serie de prestaciones y servicios, como la tramitación de la tarjeta sanitaria para personas mayores de edad sin suficientes recursos económicos, la solicitud de la prestación de la Renta Mínima, la obtención de descuentos en el transporte público o tener derecho a la escolarización, entre otros».
La directora del IBAS, Josefina Santiago, aclaró, por su parte, que la inclusión en un censo de población «no tiene por qué suponer ningún riesgo añadido para las personas que se encuentran aquí sin papeles, no más que el caminar por la calle, donde están expuestos a que cualquier policía les pare y les pida la documentación, por lo que en ese sentido no deben temer». Mediante esta campaña se espera lograr el empadronamiento de la totalidad de los 8.365 inmigrantes que solicitaron su regulación en el último proceso extraordinario, de los cuales cerca de 2.300 ya han visto resuelto su expediente, en su gran mayoría de forma positiva, apuntó.
La campaña complementa a la que se realizó el año pasado desde el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, en colaboración con las comunidades autónomas y el apoyo de la federación de municipios, que logró el empadronamiento de aproximadamente 10.000 inmigrantes en todas las Balears. La Conselleria cuenta con un presupuesto de 1.600.000 pesetas para esta campaña, que distribuirá 5.000 carteles y 10.000 folletos a través de la red de oficinas de información y atención a los inmigrantes, extendida por toda la Comunidad, y de los servicios sociales municipales.
Por otro lado, la consellera calificó de «sorprendente» la petición de la asociación de gays y lesbianas Ben Amics de su dimisión. Recordó que «desde esta Conselleria se le ha dado a esta asociación más apoyo del que nunca antes habían tenido y hemos demostrado tener siempre las puertas abiertas para el diálogo con la asociación».