La Junta Directiva de Greenpeace ha acordado por unanimidad comenzar los trámites para suspender como socio y consejero a Xavier Pastor, quien dirigió la organización ecologista durante diecisiete años, hasta que hace siete meses fue sustituido por Juan López de Uralde. El motivo alegado por la dirección para suspender a Pastor es su «implicación» en la distribución, el pasado lunes, de un comunicado de prensa «anónimo» en el que a juicio de la actual Junta Directiva se desprestigiaba a la organización y en el que se manipulaban las conclusiones de un informe realizado por el investigador Manuel Villoria sobre la gestión de Pastor al frente de Greenpeace y sobre la crisis que sufrió la organización.
En el comunicado remitido el pasado lunes a los medios se aseguraba que el informe sobre la gestión de Xavier Pastor al frente de Greenpeace concluyó que ésta fue correcta y que los proyectos que impulsó no respondieron a ningún tipo de intereses personales. El informe de Villoria constató, según esta nota, que la gestión de Pastor durante los diecisiete años que dirigió la organización fue «impecable» y que las acusaciones lanzadas contra él por un grupo de trabajadores formaban parte de una «trama organizada» para apartarle de la dirección.
En la misma nota se aseguraba además que personas próximas a Pastor están volviendo a ocupar cargos tanto en la Junta Directiva como en el Consejo de Greenpeace, y se criticaba la disminución del número de socios durante los últimos siete meses y la reducción también del número de acciones directas de la organización. Sin embargo, la Junta Directiva ha adoptado por unanimidad la decisión de iniciar los trámites para suspender a Pastor, y ha respaldado, también por unanimidad, a Juan López Uralde como director ejecutivo y a Dolores Romano como presidenta de Greenpeace. En una nota de prensa remitida hoy por la organización se asegura que el informe del profesor Manuel Villoria reconocía la honestidad e independencia de la gestión de Xavier Pastor, pero criticaba su trabajo durante los dos últimos años al considerar que no supo adaptar su gestión a la nueva estructura de la organización.
El informe desmontaba, según la nota de prensa remitida hoy por Greenpeace, la idea de la conspiración para arrebatarle el poder y concluía con que Pastor debía alejarse de la organización en España y que todas las personas involucradas en la crisis debían reconocer sus errores. Greenpeace Internacional ha respaldado la decisión de suspender a Xavier Pastor y la gestión de López de Uralde y de Dolores Romano y el «excelente» trabajo que han llevado a cabo «en circunstancias muy difíciles». La presidenta de la organización en España, Dolores Romano, ha expresado su confianza en cerrar esta crisis «que no ha beneficiado nada a la organización» y ha subrayado el compromiso de la Junta Directiva para trabajar por que Greenpeace consiga su misión en el futuro, «que es la defensa del medio ambiente».
Xavier Pastor eludió hacer ningún comentario sobre la decisión de la Junta Directiva de suspenderle, y optó por no hacer ningún comentario para no interferir en este proceso ni en el normal funcionamiento de la organización.