La mayoría de los comercios de Palma prefieren esperar hasta el día 15 de este mes para disponer de sus primeros euros, con el fin de familiarizarse con la nueva moneda. Los pequeños y medianos comercios pueden obtener billetes y monedas en euros a partir del 1 de diciembre, para satisfacer sus necesidades de efectivo en los primeros días de 2002. Sin embargo, para hacerlo antes del día 15 se deben seguir una serie de condiciones. Para ello deben firmar un convenio de predistribución con las entidades financieras.
En este acuerdo se fijan, al menos, dos condiciones: Por una parte, no se pueden poner en circulación esos billetes antes de las cero horas del 1 de enero de 2002. En caso de incumplimiento, la entidad financiera podrá exigir el pago de una indemnización. Por otra, se deberá garantizar a la entidad financiera la custodia segura de los billetes hasta la fecha. Después del día 15 ya todo resulta más fácil, y si los comerciantes desean obtener monedas hasta un importe de 1.000 euros, se pueden adquirir por su equivalente en pesetas y sin necesidad de convenio.
Precisamente por ello, los comerciantes consultados "en su mayoría, en la zona de Jaume III" prefieren ahorrarse complicaciones y esperar hasta mitad de mes. Este es el caso de Antoni Vila. «Preferimos no adquirir moneda hasta el día 15, ya que así nos ahorramos trámites. De todas formas, hasta enero los euros tienen que estar guardados en un cajón. Desde mitad de diciembre hasta el primer día de 2002 es tiempo suficiente para adquirir moneda», asegura.
También son muchos los comerciantes que confían ir a recoger sus euros en los próximos días, o simplemente informarse en su banco sobre los pasos a seguir. También hay bastantes empresarios desinformados y que no saben con precisión los calendarios previstos para el cambio. De momento, son algunos los que se están documentando, como la dependienta Joana Garcies, que ha empezado a estudiar los diferentes tipos de billetes, aunque no auténticos, sino de una hoja informativa. El comercio y la hostelería serán para el consumidor el primer punto de encuentro con la nueva moneda. Palma comienza a prepararse para afrontar el difícil reto.