Con las ausencias del presidente del Govern, Francesc Antich, y de la presidenta del CIM, Maria Antònia Munar (excusó su presencia por motivos de salud), el presidente del Fomento del Turismo de Mallorca, Miquel Vicenç, ante la presencia del conseller de Turisme, Celestí Alomar, exigió en su discurso con motivo de la celebración de la cena anual de la entidad que el CIM «asuma lo antes posible un mayor protagonismo en su política turística, porque aquí absolutamente todo afecta al turismo. Estas transferencias ya se han hecho en Eivissa y Menorca sin ningún problema y con la ventaja del contacto más directo con el sector de cada isla».
Vicenç insistió en su petición a Munar de que «acepte las transferencias de turismo si se le propone y las reclame si no se le proponen. A veces se oye decir que Maria Antònia es muy lista y no quiere Turismo porque es problemático. Queremos pensar que la Presidenta es antes responsable que lista y que, a la vista de los problemas que nos afectan, no rechazará este reto. Que no se preocupe por la dotación económica, porque si hay una buena gestión pública del turismo el propio sector aportará cuantos medios sean necesarios».
Asimismo, exigió a las respectivas administraciones arreglar inmediatamente y, «sin más discusiones bizantinas los destrozos de la última tempestad para que nuestras zonas turísticas tengan sus infraestructuras e instalaciones de ocio en buen estado al inicio de la próxima temporada».
El conseller de Turisme, Celestí Alomar, por su parte, en un discurso conciliador, afirmó que es «básico el entendimiento entre la sociedad civil y las diferentes administraciones para conseguir un gran consenso entorno al hecho turístico».
Asimismo, abogó por la diversificación en estos momentos de
incertidumbre.
Los premiados por el Fomento del Turismo de Mallorca en su edición
2001, fueron en la calidad de medallas de oro para Guillermo Cryns,
Michael Douglas (excusó su ausencia) y las medallas de plata para
la princesa Brigitta de Suecia y Pere Canals.