Apenas 150 estudiantes de Secundaria se manifestaron ayer en Palma contra la Ley Orgánica de Universidades, en una jornada de huelga de enseñanzas medias y universitaria, convocada a nivel nacional por el Sindicato de Estudiantes, que se celebró a lo largo y ancho del país.
El resultado de participación fue «mucho menor al esperado», según reconocieron los portavoces del Sindicat d'Estudiants de Balears, que estuvieron discutiendo la posibilidad de no salir.
Al final, los manifestantes decidieron, votando a mano alzada, realizar la marcha, que partió de la plaza del Tubo hasta la Delegación del Gobierno. Xavier Alonso, presidente de este sindicato -que tiene su peso mayoritario dentro de la enseñanza Secundaria- justificó el flojo seguimiento «gracias al trabajo del PP, con sus afiliados y sus directores de instituto y con todo el profesorado que ha convocado exámenes para hoy, han cerrado las puertas de los centros y han enviado notificaciones a los padres para evitar que sus hijos fueran a la huelga». También dijo que «la manifestación no la hemos convocado solos por gusto, sino porque el Consell d'Estudiants de la UIB no se ha querido sumar». El STEI y la FAPA sí mostraron su apoyo.
Alonso declaró que «la protesta no es sólo contra la LOU, sino contra el Gobierno, que lleva muchos años apretando las clavijas a la educación pública y por alguna parte tenía que explotar y está explotando de manera desigual, ya que en Balears está siendo menos fuerte que en otras comunidades». Anunció que «estamos pidiendo la convocatoria de una huelga a nivel estatal de toda la comunidad educativa, porque es la única manera de que lo que estamos haciendo valga para algo». Por lo pronto, añadió, «hemos logrado 45 direcciones para el objetivo de crear un comité de lucha en cada centro, salir de Palma y contar con el apoyo de los estudiantes de los pueblos».