Oualad Moussa es el nuevo delegado del Frente Polisario de Balears desde principios de este mes. Sustituye a Fatma Mohamed, que ahora está en la Península para seguir luchando por la causa saharaui. Hablamos con él.
"¿Qué novedades piensa introducir en la representación
del Polisario en la Isla?
"Vamos a trasladar nuestra
sede de Campanet a Palma. Seguiremos con nuestro trabajo de
sensibilización en Balears hacia nuestra problemática, tanto en la
cúspide política como en los bares y zonas más populares. Nuestra
labor está siendo ahora muy intensa.
"¿Cuál es su posición sobre los recientes altercados en
la ciudad ocupada de Smara?
"Lo de Smara ha sido muy
grave. Los sangrientos hechos ocurridos el sábado 17 de noviembre
en Smara son un reflejo de la penosa situación que atraviesa
nuestro pueblo. Pese a la censura informativa marroquí, los sistema
de comunicación por satélite nos han permitido una visión
contrastada de los hechos.
"¿Cuál es esta versión?
"El rey de
Marruecos, Mohammed VI, anuló su programada visita a Smara debido a
las reiteradas protestas de los saharauis a la llamada «tercera
vía». Pese a esta ausencia, seguimos con las manifestaciones
pacíficas, que ellos reprimieron de forma sangrienta. Como
resultado de esta intervención salvaje, más de 50 personas han sido
arrestadas y varias decenas han resultado heridas, algunas de
gravedad.
"¿Qué medidas han tomado?
"Pedir que se
liberen de inmediato a las casi 50 personas encarceladas. Ante todo
debo insistir en la necesidad que prevalezca la razón sobre la
violencia.
"Se han hecho numerosos intentos para poner una solución
al tema de la autodeterminación del Sáhara. ¿Por qué rechazan la
llamada «tercera vía»?
"Pues porque es una especie de
trampa. La «tercera vía» estipula una autonomía consensuada en una
primera votación. Pero también dice que al cabo de unos años debe
hacerse otra votación, en la que el censo ya estará «hinchado» con
marroquíes. Nosotros podíamos haber dicho que la aceptábamos, pero
a largo plazo no nos favorece. En menos de dos años entrarían
muchos marroquíes que cambiarían por completo el censo. Lo que
queremos es que se respete el de 1974 y que se haga el referéndum
en base a estos datos.