El mes de octubre sigue teniendo un aire primaveral, casi estival: el aeropuerto de Son Sant Joan ha mantenido una temperatura media de 21 grados, cuando lo «normal» es que sea de 17'8 grados. En definitiva, los mallorquines estamos «disfrutando» de casi tres grados y medio por encima de lo esperado y habitual.
«No es fácil dar una explicación. Este año no ha habido entradas frías, predominando el tiempo anticiclónico. Ha llovido poco, por otra parte. El mes de octubre es tradicionalmente uno de los más lluviosos del año en la Isla, y no ha sido así durante esta temporada», asegura Agustí Jansà, director del Centro Metereològic de les Illes Balears, quien ha facilitado estos datos.
Ha hecho calor, pero no se han batido récords. La máxima registrada este mes en Son Sant Joan ha sido de 30'5 grados (día 12), mientras que en Porreres se alcalzó los 31'5 grados el día 5 de octubre. Sin embargo, en el año 1985 se llegó a los 31'6 grados. También en el año 1987 se alcanzó la calurosa cifra de 30'8 grados.
Mientras, la gente sigue acudiendo a las playas de la Isla, aprovechando que el tiempo no refresca. Es, sin duda, una buena noticia para los ociosos y el sector servicios, aunque desde el mundo de la agricultura se vive esta «bonanza» con una cierta angustia. La sequía está haciendo estragos en el campo, y los agricultores esperan con ansiedad las lluvias y que el tiempo dé un vuelco. Sin embargo, Jansà afirma que, de momento, no habrá cambios.