A lo largo de la jornada de ayer se produjo la rotura de dos tuberías de agua, una en la calle Aragó y otra en la calle Manacor. En ambos casos, los hechos fueron causados de forma involuntaria por operarios que trabajan en las obras que se están llevando a cabo en varios tramos de las dos calles. La rotura más importante fue la que tuvo lugar en la calle Aragón, en donde se rompió una tubería de ochenta centímetros de volumen en tres puntos diferentes. El hecho se produjo alrededor de las 09.30 horas y quedó solucionado al mediodía aproximadamente. En la calle Manacor el incidente fue mucho menos importante y quedó solucionado en menos de una hora.
La presidenta de EMAYA, Maria Crespo, señaló ayer que las roturas de tuberías son, desde que se iniciaron las obras del Pla Mirall o los nuevos aparcamientos, un hecho relativamente habitual. «Nos encontramos con situaciones parecidas casi cada día», indicó. Crespo recordó que EMAYA cuenta con un servicio técnico reforzado para poder cubrir el aumento de roturas causado por las obras. «Cuando una empresa constructora solicita un permiso de obras se le facilita un mapa topográfico para que pueda saber el lugar exacto en el que se encuentran las diferentes conducciones», prosiguió Crespo. La presidenta de EMAYA señaló que, a pesar de ello, «a veces la persona que está haciendo una perforación no sabe el lugar exacto en el que se encuentra una conducción o desconoce la existencia de una desviación que no consta en los mapas».
Por otra parte, el Grupo Municipal del PSM-EN en Cort emitió ayer un comunicado en el que pide a los responsables políticos de EMAYA que, a raíz de estos hechos, «actúen con más eficacia y que tomen las medidas necesarias con tal de intentar evitar conflictos de estas características», señala. El PSM-EN interpelará en el próximo consejo de administración de EMAYA «respecto a la problemática y a las posibles responsabilidades», concluye.