Un grupo de padres y madres de alumnos del segundo ciclo de Infantil del Colegio Público Blanquerna, perteneciente a Marratxí, denunciaron ayer que a sus hijos se les ha colocado «en el pasillo» ante la falta de aulas suficientes en el centro. Una de las madres explicó que, para sorpresa de todas las familias, cuando llevaron ayer a sus hijos al colegio se toparon con la noticia de que la dirección había habilitado un pasillo para los 25 alumnos de cinco años, «en el que no tienen ni ventanas y están obligados a pasarse el día con luz eléctrica», lamentó Carmen Cortés. La indignación les llevó a exigir una reunión con el director del centro, mientras la Conselleria d'Educació ordenaba una inspección en el centro.
Al respecto, el director general de Planificació i Centres, Jaume Gual, informó, una vez conocido el resultado de la inspección, que esta decisión se ha tomado a la espera de que se construya en el colegio un módulo de seis unidades de Infantil, un trabajo ya aprobado pero que está pendiente de su adjudicación. Gual matizó que «no es un pasillo, sino un hall que está bastante cerrado, que si bien es cierto que no tiene ventilación, al haber unos vidrios fijos, el ayuntamiento de Marratxí se ha comprometido a colocar ventanas».
La misma explicación dio la dirección del centro a los padres, a los que comunicó que las obras podrían estar finalizadas para después de Navidad y que, entre tanto, se abrirían ventanas en este espacio. Pero la respuesta no convenció a los progenitores, por lo que hoy volverán a exigir una nueva solución a esta falta de espacio en el centro, «y si no tienen sitio, es mejor que no acepten a tantos niños a que los tengan en un pasillo», aseveró Carmen Cortés. «Queremos que les coloquen en una clase normal, porque esto que han hecho dudamos mucho que sea legal», añadió.