Quienes ayer a mediodía almorzaban en la terraza del restaurante Simbad, frente a s'Hort des Rei, se llevaron un sorpresa morrocotonuda al ver sentarse en dos mesas a la pareja de actores norteamericanos Kurt Russell y Goldie Hawn con sus hijos. Y es que Mallorca es así. Cuando menos te lo esperas te sientan a tu lado a un famoso. O como en este caso, dos. O para ser más exactos, tres, pues con ellos estaba Kate Hudson, hija de Goldie y de su primer marido, un actor de televisión, nominada en en los últimos Oscar por «Casi famosos», con la que ganó un Globo de Oro.
Venían de hacer compras, con la intención de comer a base de tapas, pero al estar completo el chiringuito, se sentaron en el Simbad. El protagonista de «Golpe en la pequeña China» lucía un sombrero de paja. Su mujer "Goldie" y Kurt están juntos desde 1986. «La recluta benjamín» cubría sus ojos con unas gafas Valentino, y cuando nos descubrió "¡éramos tantos ya sobre la acera!", trató de cubrirse por entero su rostro "operadísimo" nos dijo, luego, un vecino de mesa. ¿Y qué? con un abanico de color rojo chillón, cosa que logró a medias, pues al rato se cansó, pasó de nosotros y siguió a su bola, o sea, comiendo.
¿Qué? Pues algo de lo que pidieron, porque vean qué comanda hicieron: paella-fideuà para cuatro, parrillada de carne para tres, mariscada para dos, dos pollos al ast con patatas, mostaza, tomate, y demás condimentos típicos entre los gourmets norteamericanos, y, para beber, sangría para parar un tren, servida en pitxer. El almuerzo les costó 37.000 pesetas y dejaron 3.000 de propina. Como recordarán nuestros lectores, Goldie ya estuvo en Mallorca hace cinco años, hospedándose en La Residencia de Deià. Kurt es la primera vez que pisa la Isla.