El Govern ofrecerá al grupo popular la posibilidad de proponer a dos de los siete miembros del Consell Consultiu, un órgano jurídico que está en funciones y que debe ser renovado con urgencia. Esta propuesta será hecha mañana por el conseller de Presidència, Antoni Garcías, al portavoz del grupo popular, José María González Ortea, permitiría al PP elegir a un miembro del Consell Consultiu de los cuatro que nombra el Govern. Además, los populares también tendrían la posibilidad de proponer a uno de los tres representantes de dicho órgano consultivo y que deben ser elegidos por el Parlament.
La única condición que planteará el Govern al PP es que no haya vetos a las personas que elijan los distintos grupos políticos. El Ejecutivo autonómico teme que los populares mantengan su veto a Joan Oliver Araujo, actual miembro del Consell Consultiu, y que el PP se niega a votar en una hipotética votación en el Parlament. Los nombramientos que haga la Cámara autonómica requieren, en esta ocasión, el apoyo de las tres quintas partes de los diputados, lo que obligará a todas las partes a buscar el consenso.
Sin embargo, la propuesta que hará mañana al Govern al PP consistiría en ofrecer un puesto de los cuatro que debe aprobar el Ejecutivo autonómico. En este caso, los nombramientos por parte del gabinete que preside Antich se verían reducidos a dos, ya que la ley obliga que un integrante del Consell Consultiu sea un funcionario, lo que garantiza la continuidad en el puesto de Pere Aguiló Monjo, actual jefe de los servicios jurídicos del Govern.
Si la reunión entre Garcías y González Ortea acaba con acuerdo, los nombramientos de los cuatro integrantes del Consell Consultiu podrían ser aprobados en el próximo Consell de Govern. De esta manera, el Parlament debería elegir a los otros tres miembros. En este caso, el acuerdo que se planteará al PP es que elija a otro miembro del Consell Consultiu, mientras el PSOE propondría a otro jurista y el resto de partidos del Pacte de Progrés nominaría al tercer integrante del órgano consultivo. Si no hay consenso, el Govern podría elegir a sus cuatro miembros y un sorteo determinaría la continuidad de los tres juristas necesarios para cubrir el Consell Consultiu.