«El mercado se ha recuperado y Balears repetirá las mismas cifras de turismo alemán de 2000», afirmaba ayer en Dresden el portavoz de la junta directiva del touroperador TUI, Volker Böttcher, tras la presentación de los folletos del grupo TUI para la temporada de invierno 2001"2002. Este incremento de ventas paliará los descensos que se habían previsto para agosto, septiembre y octubre.
Böttcher vaticina que el final del verano va a ser muy bueno en las Islas, «en parte porque las capacidades hoteleras en los destinos turísticos del Mediterráneo oriental, principalmente Turquía y Egipto, están ya al completo, circunstancia que está propiciando una normalización de ventas hacia las Islas, hecho que no ha venido sucediendo durante los meses de mayo, junio y primeros veinte días de julio, de ahí la preocupación del sector hotelero balear. Al final, visto cómo está actuando el mercado, Balears finalizará 2001 con el mismo número de turistas alemanes que en 2000».
En este sentido anadió que el Mediterráneo oriental va a seguir quitando cuota de mercado a las Islas por una cuestión de precios, «pero la calidad de la oferta hotelera, infraestructuras y profesionalidad de la hotelería balear son elementos claves que garantizan el éxito de Balears como destino turístico en Alemania, pese a las polémicas que se han planteado con la ecotasa y las noticias negativas procedentes de las Islas por conflictos laborales y la estrategia política errónea de las autoridades de Balears. Mallorca es y será el destino turístico número uno para los alemanes. Aquí, hay que añadir que en las últimas semanas se ha producido un cambio de actitud en el Govern, al percatarse de que la estrategia turística que estaba llevando a cabo no era la adecuada. Esperamos que continue en esta misma línea de trabajo, ya que ello beneficiará a todos».
Preguntado sobre el impuesto turístico, el portavoz de la junta directiva de TUI puntualizó: «No es una cuestión que estemos hablando con los hoteleros de cara a la contratación del próximo verano 2002, pero el impuesto turístico ha sido muy mal vendido por parte del Govern. El mercado turístico alemán no está en contra de la ecotasa, ya que acepta la filosofía del impuesto turístico y está dispuesto a pagar la ecotasa siempre y cuando vea que lo que se paga se invierte en la protección del medio ambiente y las zonas turísticas. Toda la polémica que se ha planteado en Alemania es porque se ha comunicado muy mal esta iniciativa».