Los partidos del Pacte de Progrés podrían volver a gobernar dentro de dos años con una holgada mayoría, según se desprende de la encuesta realizada por «Forma Consultors» para este periódico. Si las elecciones se celebraran ahora mismo, el PP perdería entre 3 y 4 diputados en Balears, un descalabro lo suficientemente importante para revalidar el pacto de gobierno de las fuerzas progresistas. El PP, en el mejor de los casos, tampoco podría gobernar con Unió Mallorquina, que ganaría un escaño en relación a las elecciones de 1999. El sondeo electoral realizado para Ultima Hora arroja unos resultados electorales que abrirían un nuevo escenario político, deseado desde hace tiempo por las fuerzas de izquierda: los votos de Maria Antònia Munar ya no serían necesarios para que Antich volviese a ser investido presidente del Govern.
Las fuerzas progresistas, en caso de que la coalición Esquerra Unida"Els Verds obtuviese 3 diputados, podrían formar gobierno sin la necesidad de pactar con Maria Antònia Munar. Sin embargo, UM sí podría mantener el gobierno del Consell Insular de Mallorca con el apoyo del PP. El principal bajón electoral del PP se produciría en Mallorca, donde los populares perderían entre 2 y 3 escaños. En Menorca, el PP mantendría los mismos resultados que hace dos años, mientras en Eivissa"Formentera los populares también perderían un escaño y se alejarían aún más del Pacte Progressista que lidera Pilar Costa desde 1999.
Los socialistas se beneficiarían del descalabro electoral del PP a nivel autonómico, pero no en Mallorca, la circunscripción por la que volvería a presentarse Francesc Antich como aspirante a la Presidència del Govern. El PSOE arrancaría muchos votos en Menorca, que le llegarían de la izquierda, precisamente de los actuales socios de gobierno de Joana Barceló. El PSM"Entesa Nacionalista y Esquerra Unida, que en la actualidad tienen un escaño cada uno, se quedarían sin diputados en Menorca y se los cederían al PSOE.
Mientras, el PSM se mantendría en Mallorca como la tercera fuerza política, con 5 escaños. Es decir, los nacionalistas ganarían un diputado en Mallorca en relación a las pasadas elecciones autonómicas, que compensaría la pérdida del escaño de Menorca. La situación del PSM en el Parlament no cambiaría. Unió Mallorquina, con 4 escaños, ganaría un diputado en relación a los pasados comicios autonómicos, pero dejaría de ser la fuerza política bisagra en el Parlament. La fuerza nacionalistas se consolida como la cuarta fuerza política de Mallorca, pero no despega electoralmente tras gobernar dos legislaturas seguidas en el Consell.