A las once de la mañana de ayer, las motos comenzaron a rodar. Fue cuando la bella Ana Vives, de rojo completo "¡y tan poco, afortunadamente!", levantó la banderola para dejarla caer vertiginosamente.
Minutos antes, Jaime III había sido un rugir de motores originados por máquinas de todo tipo de marcas y cilindradas, más de doscientas de ellas llegadas desde distintos puntos de la geografía hispana, que poco a poco se habían ido adueñando de aquella avenida, cuya cabecera se había ubicado frente a El Corte Inglés y la Cope.
Porque estamos hablando de la 100 en moto, evento organizado por Cadena 100 ya en su quinto año, y que en este ha logrado reunir alrededor de unas dos mil, tal vez unas pocas menos, a cual más bella y potente, y que ha contado con la colaboración de El Corte Inglés y la ayuda de Media milla. Y, por supuesto, ha tenido uno de los mayores atractivos de la jornada: Ana Vives, Chica 100 "por lo de la Cadena 100, y porque si la hubiéramos tenido que puntuar de 1 a 100 seguro que se queda con el 100", para más señas cantante "buena cantante, va a grabar con su amiga Natalia un CD" y aspirante a Miss Balears, enfundada en un diminuto uniforme, fue la encargada de dar la salida y, hasta ese momento, de alegrar al personal.
De entre las motos nos llamó la atención una BMW, llegada desde Barcelona, de potentísima cilindrada con aire acondicionado y marcha atrás. Una virguería a precio de mareo, pues no es lo que vale la moto, sino lo que cuesta tenerla equipada así.
El recorrido discurrió con toda normalidad. Ni siquiera un pequeño accidente, ni un rasguño.