El turismo de masas, sostén del 76% de la planta hotelera insular, sufrirá una drástica reducción en Balears, de hasta el 20%, según declaró el conseller de Turisme, Celestí Alomar, al semanario alemán «Focus». En concreto, el objetivo del Govern es reducir el turismo masivo, fundamentalmente con la disminución del número de plazas hoteleras en Mallorca, según afirmó Alomar.
El conseller indicó que dentro de unos años «no habrá aquí ningún Ballermann» (como se conoce la playa del Arenal que ha sido utilizada para hacer películas cómicas sobre los jóvenes alemanes de vacaciones). «La política turística de las Islas se centrará básicamente en potenciar el turismo de calidad, el golf y actividades de naturaleza y cultura», dijo Alomar.
Mallorca es el destino preferido de los alemanes, según «Focus», que han rebautizado la isla como el «17 land» de Alemania. Así, más de 4'3 millones de alemanes pasaron sus vacaciones en Balears en el año 2000.
Las declaraciones de Alomar tuvieron una inmediata réplica en la patronal hotelera, que recordó el peso que tiene el turismo de masas en la industria vacacional.