Responsables de la Conselleria d'Obres Públiques y del Ajuntament de Palma analizaron ayer los problemas de tráfico surgidos tras la entrada en funcionamiento de la nueva estación de autobuses, en la calle Eusebio Estada, al lado del puente del tren. Joaquín Rodríguez, director general d'Obres Públiques, y Miguel Femenía, jefe de Tráfico del Consistorio, se desplazaron a la terminal para comprobar las críticas realizadas por los conductores el primer día de la apertura de la estación.
En primer lugar, ambos políticos pudieron constatar que el semáforo que hay a la salida de la estación sólo está en verde en intervalos de 10 segundos, lo que en horas punta "13 y 19 horas" origina colas de vehículos en Eusebio Estada. También el semáforo instalado al principio de esta calle entorpece el tráfico de autocares, ya que, según denuncian los chóferes, se pone verde para vehículos y peatones y es peligroso. Según explicó Joaquín Rodríguez a este diario, el responsable municipal Miguel Femenía se ha comprometido a modificar las frecuencias de los semáforos para que no se colapse Eusebio Estada.
Más difícil, a juicio del director general d'Obres Públiques, es mejorar las salidas de la Ciutat hacia los municipios de la Part Forana. La mayoría de autocares tienen que ir hasta el polígono de Son Castelló para luego tomar su ruta. Joaquín Rodríguez indicó que se trató este tema, pero precisó que la Ley de Transportes prohíbe la creación de más pasos a nivel de los que hay, por lo que los autocares no podrán atravesar las vías del tren de Sóller para buscar otras salidas.
La Conselleria d'Obres Públiques también intentará poner fin a la falta de información de los usuarios sobre el nuevo emplazamiento de la estación de autobuses. Desde mañana, dos azafatas informarán en la estación de tren de la Plaça d'Espanya sobre la nueva ubicación y los servicios de los autocares de la Part Forana. Durante los próximos 15 días, permanecerán en este punto para facilitar información.