Tres directores generales del Govern con responsabilidades urbanísticas (Manuel Cabellos, d'Ordenació del Territori; Jaume Carbonero, d'Habitatge, y Onofre Rul.lan, de Ports i Litoral) coincidieron ayer en destacar la necesidad de parar el crecimiento urbanístico y poner fin al «paisaje de grúas» que sufre el archipiélago. Los tres directores generales y Macià Blázquez (vicepresidente del GOB y profesor de la UIB) participaron ayer en el Centre Cultural Sa Nostra en una mesa redonda organizada por EU-Els Verds y moderada por el periodista Albert Travesset, que trató cuestiones relacionadas con el territorio.
Onofre Rul.lan destacó que han pasado «a la historia» los tiempos «de lucha por la protección de determinadas zonas con valores naturales singulares». Consideró que ahora se trata de «salvar el territorio, tenga o no tenga valores naturales». «La presión urbanística se ejerce sobre todo el territorio "afirmó Rul.lan", como lo demuestran las 40.000 nuevas plazas que se construyen anualmente. Este ritmo de crecimiento crea unos graves impactos ambientales y sobre los recursos naturales. Mientras tanto, los consells y ayuntamientos quieren tener suelo urbanizable para repartir porque así son importantes y tienen poder».
Jaume Carbonero reivindicó el papel del Govern en la definición de la política territorial y negó que los actuales ritmos de crecimiento tengan que ver con la sostenibilidad, «por lo que hemos de avanzar hacia la reconversión del urbanismo y la recuperación territorial». Para Carbonero, la llegada de menos turistas no es algo negativo «sino al contrario, es una magnífica noticia, en contra de los mensajes subliminales que nos envían determinados sectores apelando a una pérdida del nivel de vida».
Manuel Cabellos quiso subrayar la importancia de las medidas de legislación restrictiva aprobadas durante los últimos diez años: la Ley de Espacios Naturales, las moratorias del Consell, las Directrices de Ordenación del Territorio y la Ley de Medidas Cautelares y de Emergencia Urbanística aprobadas en 1999, nada más entrar el Pacte en el Govern.