Durante la historia de las Balears ha sido frecuente, y todavía lo es, que muchos estudiantes isleños se desplacen a Barcelona para realizar sus estudios universitarios. Algunos de estos estudiantes vuelven a las Islas y otros se quedan en Catalunya, en muchos casos, triunfando. Lo que ya no es tan habitual es que una universidad catalana tenga un rector mallorquín. Pero es pura matemática. Entre tantos estudiantes isleños alguno tenía que quedar y destacar, y éste, desde el jueves, es Joan Tugores (Palma, 1953), que es el nuevo rector de la centenaria Universitat de Barcelona.
"¿Su caso es el del típico mallorquín que se quedó en
Barcelona?
"Sí, es así. Yo me formé a principios de los años 70 cuando todavía
no existía la Universitat de les Illes balears (UIB) y tuve que
venir a Barcelona donde me licencié en Economía y Derecho en 1975,
como tantos otros mallorquines, que, incluso hoy en día, tienen que
salir de Balears para poder estudiar una carrera. He hecho toda mi
carrera aquí.
"¿Y qué lugar ocupan hoy por hoy los estudiantes
mallorquines en la Universitat de Barcelona?
"Todavía son una parte importante y numerosa. Incluso tenemos un
grupo bien definido de mallorquines.
"¿Qué diferencias hay entre una universidad como la de
Barcelona con la UIB?
"La primera gran diferencia es histórica. La Universitat de
Barcelona acaba de cumplir 150 años, con las inercias que esto
supone, que son difíciles de cambiar. La segunda gran diferencia es
el tamaño. Toda la comunidad que tiene la Universitat de Barcelona,
solo con el holding, reúne a unas 100.000 personas, que es el
tamaño de una ciudad media, como Tarragona, por ejemplo. Estas
diferencias hace que su gestión sea muy complicada, pero también me
hacen sentir como si fuera el alcalde de mi pueblo, con apoyo
mayoritario.
"¿Cúales son los grandes retos de la Universitat de
Barcelona? ¿Existe un 'pique' con la Autónoma?
"No, no hay. Ahora con Internet es tan rival una universidad
extrangera como una vecina. El gran reto es demostrar que a pesar
de los 150 años de historia somos una universidad moderna. También,
ahora que los políticos hablan tanto, tenemos que demostrar el
capital humano que poseemos.
"¿Cuál es su opinión sobre el anteproyecto de reforma
universitaria propuesto por el Gobierno del Estado?
"Estoy totalmente de acuerdo con la postura defendida por la
Universitat de Barcelona criticando el anteproyecto. La autonomía
universitaria es un derecho constitucional que el anteproyecto no
refleja.