El grupo hotelero Sol Meliá, que preside Gabriel Escarrer, no puede llevar a cabo su proyecto turístico estrella en Palma porque una particular se niega a vender un solar de 160 metros cuadrados, que está ubicado en la inmediaciones de la calle Baños de Palma (lindante entre las calles Joan Miró y el Passeig Marítim), circunstancia que está impidiendo la construcción del Centro de Convenciones, Congresos y Exposiciones Victoria, cuya inversión supera los mil millones de pesetas.
El inicio de las obras debería haber tenido lugar a finales del pasado verano, fecha en la que la propietaria del solar, que tiene una superficie de 160 metros cuadradados, se negó a venderlo al precio que le ofertaba la cadena de Escarrer. Este hecho motivó la paralización «sine die» de las obras de construcción del Centro de Congresos Victoria, pese a que se había procedido a todo el movimiento de tierras de los solares adquiridos en los aledaños del hotel Victoria lindantes con la calle Joan Miró hasta la Plaça Gomila.
Para dirimir este litigio tuvo que intervenir el Consulado de Dinamarca, al ser la propietaria del solar una danesa, quien buscó a la súbdita un letrado para que defendiera sus intereses ante Sol Meliá. Los representantes legales de la cadena hotelera iniciaron entonces un proceso negociador, «pero las pretensiones económicas de la propietaria de este solar fueron calificadas de desorbitadas por Sol Meliá, de ahí que se decidiera al final no aceptarlas y paralizar todo el proceso de construcción de esta obra hasta que la junta de compensación resuelva el caso, dado que para conseguir la licencia de obras del Ajuntament de Palma debíamos presentar el proyecto en su totalidad sin flecos pendientes», indicaron desde Sol Meliá.
La cadena hotelera retiró las grúas a finales del pasado año, dado que la resolución del caso se alargaba más de lo previsto, «la junta de compensación creada es la encargada de dirimir este litigio. En principio, la propiedad del solar en cuestión tiene de plazo hasta el próximo día 30 para aceptar las condiciones económicas que se negociaron en su día. En caso de que no se adhiera, se aplicará la ley en estos casos».