El Hospital de Son Dureta invertirá este año cerca de 900 millones en diversas acciones para la mejora asistencial, informaron ayer el director territorial del Insalud, Javier Rodrigo de Santos, y la gerente del Hospital Universitari Son Dureta, María Ibars. De estas iniciativas destaca la adjudicación este mes de mayo de la redacción del proyecto de la cirugía cardiaca, que probablemente se adjudicará en octubre. Este proyecto finalizará en el primer semestre de 2002 y cuenta con un presupuesto de 350 millones.
Como consecuencia de esta obra, apuntó Ibars, se dará paso de forma natural a la unidad de trasplantes de corazón y, además, aportará uno 500 metros cuadrados al Servicio de Urgencias. Asimismo, el hospital tiene previsto, entre sus acciones inmediatas, la mejora de la infraestructura de la unidad de trasplantes de médula ósea para adecuarla al nivel de la calidad asistencial. Este proyecto tiene un presupuesto de 65 millones y estará listo a finales de año. Otra de las actuaciones previstas se refiere a la mejora de la UCI para neonatos, una obra presupuestada en 11'5 millones, además del aumento de cuatro nuevos puestos de incubadoras, que han costado 30 millones.
El hospital ha renovado, con un coste de 30 millones, un TAC en el Pabellón A con una obra de adecuación, iniciada en abril y que finalizará en julio, y el TAC helicoidal de última generación con un coste de 70 millones. La reparación de las fachadas del hospital, con un presupuesto de 377 millones, se inició en mayo y se prolongará a lo largo del año próximo. Previamente Rodrigo de Santos declaró que el Insalud está trabajando «sin restricciones económicas» en la elaboración de un proyecto de futuro para Son Dureta, un plan director que cuenta con un presupuesto global de 12.000 millones y que resolverá tanto los problemas arquitectónicos como de funcionamiento del primer hospital de referencia.
La nueva ordenación sanitaria de Mallorca derivada de la apertura «inminente» del Hospital de Son Llátzer y de la «previsible» del Hospital de Inca, unida a los hospitales de Son Dureta y de Manacor, supondrá contar con cuatro hospitales de agudos. Respecto a la cartera de servicios de Son Dureta, el plan tendrá en cuenta la frecuentación real y potencial de futuro del hospital así como las demoras, listas de espera y población turística. El plan, que estará terminado en julio, determinará las decisiones a adoptar desde el punto de vista funcional, lo que permitirá la adjudicación del proyecto arquitectónico en 2002.