Astilleros Astipal interpondrá un contencioso adiministrativo contra la Autoritat Portuària de Balears al expresar su disconformidad por la pérdida de su concesión, en beneficio de una unión temporal de empresas.
Según indicó a Ultima Hora Antonio Ramón Medina, gerente de la empresa, considera que «una empresa como la nuestra, con mano de obra cualificada y prestigio internacional en este sector, no puede ser objeto de una intervención arbitraria».
Astipal, recalca la empresa, factura más de 800 millones en el mercado estatal y en Palma dispone de instalaciones de alta calidad y especial cuidado con el medio ambiente, que avalan su solvencia económica en un proyecto de viabilidad. La rescisión de la actual licencia supone además la pérdida de más de cincuenta puestos de trabajo, en beneficio de una asociación empresarial que, en opinión de Antonio Ramón, «puede constituir una operación especulativa inmobiliaria».
El edificio que ocupa actualmente Astipal ha multiplicado por diez su valor inicial, hasta situarse a 7.500 pesetas el metro cuadrado. «Esta revalorización espectacular se explica dentro de un macroproyecto de marina, que supone una posible recalificación de espacio destinado ahora a la reparación de embarcaciones para hasta cien atraques de más de 200 millones cada uno, junto a operaciones inmobiliarias. Se trata del proyecto del Port Segle XXI, encubierto», advierte Astipal.
Para sus directivos, la reubicación de usos y espacios portuarios debe contemplar la continuidad de las empresas establecidas, asegurando su continuidad en uno u otro emplazamiento, pero no su desaparición sin justificación aparente.