El conseller d'Educació i Cultura del Govern balear, Damià Pons, anunció ayer la oferta pública de ocupación para el sector docente para el curso 2001/02, que prevé la convocatoria para julio de 420 plazas para el cuerpo de maestros, profesorado de secundaria y profesores técnicos de Formació Profesional. Esta convocatoria supone un incremento de 60 plazas con respecto a la convocatoria del año pasado, que fue de 360 plazas.
La convocatoria incluye plazas para especialidades de Formación Profesional Específica en el cuerpo de Secundaria, que no se convocaron el año pasado. En cambio, este año no se prevé sacar a concurso ninguna plaza para las escuelas oficiales de idiomas. Por tanto, la oferta para el curso próximo queda de la siguiente manera: se convocan 195 plazas para el cuerpo de maestros (185 el curso pasado), otras 195 para el profesorado de Secundaria (145 el año anterior) y 25 para el profesorado técnico de FP (16 el curso 2000/01), además de 5 para inspectores.
Aunque Pons dijo que lo ideal sería tener entre un 10 o 12% de interinos, reconoció que en Balears se alcanza el 28%, porcentaje que se dispara en el caso de Eivissa y Formentera, donde se sobrepasa el 40%, mientras que en Mallorca se sitúa en el 18% y Menorca es la isla con una plantilla más estable. Así, con la finalidad de favorecer la consolidación de los claustros de profesores en los centros públicos de Eivissa y Formentera, se ofrecerá la posibilidad de que un porcentaje de las plazas de Infantil y Primaria sean cubiertas mediante convocatoria específica para las mencionadas islas, con el compromiso por parte del profesorado que se presente de permanencia de un mínimo de tres años en su destino definitivo.
El responsable de Educació reconoció que el sistema educativo de Balears ha experimentado un crecimiento cuantitativo muy considerable, a partir de la entrada en vigor de las transferencias, sobre todo por la aplicación de la LOGSE y por el natural crecimiento de la población escolar. Esta realidad ha provocado en estos años la contratación de numerosos profesores nuevos, por lo que Pons consideró razonable una convocatoria ampliada de plazas, al objeto de reducir el porcentaje de interinos.