El president del Parlament, Maximilià Morales, aprovechó ayer el discurso de celebración del XVIII aniversario del Estatut d'Autonomia para reprender a los diputados el tono crispado e incluso ofensivo que han mantenido durante todos estos días. «No minimicemos el debate político rebajándolo al interés partidista. Hagamos lo que hicieron los redactores del Estatut», afirmó Morales.
El presidente de la Cámara añadió que la razón «no es monopolio de nadie» y reclama el concurso del diálogo «y no de la utilización sistemática de la fuerza y de la violencia, sean del signo que sean». Para Morales, la grandeza en el ejercicio político está en que, aunque se tenga la fuerza para ganar, se emplee el diálogo, la persuasión y el convencimiento. Morales exigió a los diputados que empleen la cortesía y el respeto político «que tanto aprecia el pueblo».
Pero no fue la única reclamación que realizó el president de la Cámara durante el discurso de ayer. De hecho, el president también se dirigió a los diputados autonómicas a que se pongan de acuerdo de una vez por todas para la elección de las Sindicaturas de Comptes y de Greuges. «Una Comunitat Autònoma no se puede considerar completa, democráticamente completa, si le faltan dos instituciones básicas de control y de protección al ciudadano, como son el Síndic de Greuges y la Sindicatura de Comptes», aseguró el president de la Cámara.
Morales recordó que se trata de un esfuerzo que viene demandando de forma reiterada a todas las fuerzas políticas «y que requiere la aportación generosa de todas ellas, sin ninguna excepción, para evitar así cualquier tipo de protagonismo». Para el president del Parlament, lo verdaderamente importante a la hora de decidir a estas personas no es el color político, sino la valía, la honorabilidad y una «limpia ejecutoria democrática». Sin embargo, Morales recordó además que el Estatut y las leyes autonómicas establecen que la elección debe hacerse por mayoría cualificada, por lo que es preciso que los partidos comiencen a negociar cuanto antes.